10/08/2015
El mapa de farmacias necesarias en el Archipiélago se consensuó hace ocho años y el año pasado los profesionales recibieron con alegría la convocatoria del concurso para abrir nuevas boticas, justo hoy hace un año. Sin embargo, doce meses después la convocatoria sigue en su fase de baremación, lo que ha obligado al Gobierno de Canarias a prorrogar los plazos para su resolución.
La explicación, según coinciden en afirmar tanto desde el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Santa Cruz de Tenerife como desde la Federación Canaria de Farmacias, está en el elevado número de solicitudes presentadas. De hecho, se han recibido casi diez peticiones por cada oficina, «lo que complica mucho el proceso», indica el presidente de la organización colegial, Guillermo Schwartz.
Cada una de los 560 expedientes pasa la revisión de los técnicos de la Administración sanitaria, que son deben «revisar que los méritos que aportan son correctos y si logran la puntuación que corresponde según la convocatoria», explica por su parte el presidente de la Federación, Manuel Díaz Feria. Por eso, ambos representantes del colectivo consideran que el retraso en la tramitación es razonable.
Es más, tanto Schwartz como Díaz Feria aseguran que ya se auguraba desde el pasado año que se trataría de un proceso largo, salpicado además por varios recursos judiciales presentados al respecto. Además, también comparten la percepción de que es lógico el interés despertado por profesionales de las boticas en este concurso.
«Es normal porque son muchos años esperando por la convocatoria y más si se tiene en cuenta la cantidad de profesionales que han estado saliendo estos años de las facultades de Farmacia, que por otra parte, cada vez son más», resume el presidente de la Federación Canaria de Farmacias.
A pesar de que Manuel Díaz Feria se pregunta si «no se estará creando una saturación de farmacéuticos porque salen más licenciados de los que el sistema puede acoger», entiende que por esta razón se argumenta que de las 111 boticas previstas en el concurso solo se hayan convocado en una primera fase un total de 60 oficinas. «No parece que haga falta más», entiende el portavoz de la Federación.
Schwartz por su parte argumenta que «la realidad actual es muy diferente a la actual y por eso se fraccionó la oferta del concurso en dos fases». La diferencia de hace ocho años a estos momentos se basa en el mismo argumento que provocó el diseño del mapa inicial: la población. La normativa fija un número de habitantes por cada una de las boticas, «pero las cifras de ciudadanos en el Archipiélago y en toda España se han reducido y además no parece que se vayan a recuperar a medio plazo», augura Manuel Díaz Feria.
En cualquier caso, los responsables de las 560 solicitudes esperan con ansia la baremación que les dará opciones para obtener una farmacia, cuestión que el presidente del Colegio Oficial tinerfeño confía en que se produzca a finales del presente año. En cualquier caso, Schwartz avanza que el proceso es largo de por sí y que «hay que tener en cuenta las alegaciones tras la baremación».
Al final, según sus palabras, «se trata de garantizar que el proceso se hace con toda la limpieza posible y evitar que se vuelva a producir la judicialización del anterior concurso de farmacias a raíz de varios recursos ante los tribunales». Según el presidente de la organización colegial se trata de circunstancias con las que hay que contar «porque siempre hay quien considera que su puntuación no está bien dada» pero insiste en que todo el proceso «hay que hacerlo con seriedad y rigurosidad porque a veces hacer las cosas más rápidos provoca más problemas».
Además, mientras Manuel Díaz Feria plantea dudas sobre la convocatoria de las 51 farmacias que restan del mapa previsto, Guillermo Schwartz, mantiene la expectativa de que se ofrezcan, pero puntualiza que «tendrá que ser solamente cuando el actual concurso esté concluido y las 60 boticas entregadas».
Fuente: DiariodeAvisos
